La capacidad disuasoria de los perros adiestrados en guarda y defensa va más allá de sus típicas funciones imaginables. Las posibilidades de estos animales puede ser además la de escolta canino, o protección ejecutiva. Dentro de este ámbito la implantación de perros puede llegar a ser innumerable.
- Grandes patrimonios.
- Personas que viajan frecuentemente por negocios y dejan a su familia en casa.
- Famosos.
- Empresarios que tratan con efectivo o joyas.
- Propietarios de negocios polémicos.
- Cualquier persona que esté en riesgo de secuestro o secuestro de un familiar, etc..
Estos perros deben contar con un entrenamiento especifico sobre la función, el control y la prevención. De esta manera tendremos un compañero capaz de resolver cualquier situación de emergencia y convivir con otros perros en comunidad y estar integrados en una familia.